6.5.12

HE


Él apareció sin que lo invitara nadie, abrió una puerta a lo desconocido y desapareció por obra de arte. Él  dio un giro, se interpuso en mis pensamientos día y noche . Me di cuenta que había provocado en mi una especie de capricho, una especie de locura un amor intenso hacia lo desconocido. Sabía donde se encontraba, sabía que él estaba ahí esperando, pero quería que el moviera sus piezas primero. Quizás por miedo, sobre todo a fallar.



1 comentario:

Anónimo dijo...

me siento muy identificada.
hermoso texto.