Relatos del ayer

En una misa de hace unos domingos atrás, escuchaba en la homilía al padre decir: " el perdón a veces se puede decir sin ser sentido verdaderamente" quizás estas palabras no fueron las exactas, si no lo que yo interprete de ellas; y fue entonces cuando mis oídos dejaron de escuchar sus siguientes palabras y, me sentí sumergida en mis pensamientos y recuerdos.
Susurre para mi misma: "Soy capaz de decir perdón pero no de olvidar", no se como todo en mi cabeza se entrelazo y se desvió del interesante diálogo pero hizo que vea que hay siempre otras formas, no sólo la del ganarse el perdón si no también el dar un punto final a historias pasadas aunque ese punto tenga nombre de perdón.

Se que unas entradas anteriores hable del perdón, pero este es una historia muy diferente...