Cuando somos chicos queremos que todo dure para siempre, que hay una sola verdad pero cuando vamos creciendo se abren muchas puertas e interrogantes, se planta en nosotros un nuevo sentimiento, el dudar de todo, por que ahora hasta ese todo es cuestionable. Dudamos por que desconfiamos, por que nuestra mente es más astuta, o por que tan solo queremos dudar. No es algo malo hacerlo, sino que ya es costumbre y no se puede cambiar.
Volvi, creo que debo de decir que hay tantas cosas buenas y malas en mi vida que siempre voy a ser capaz de escribir mi pequeña historia.
1 comentario:
Genial texto, muy cierto. Pero eso de que nuestra mente se hace más astuta es cuestionable... porque muchas veces lo que nos hacemos es más imbéciles.
Un guiño ;)
Publicar un comentario